Profe: A ver Bellota mía, tú no sabes que to' está en los libros... ¿me lo tienes que preguntar todo? Pilla un libro y búscalo.
Bellota: Profe es que hay muchos libros ¿cómo sé cuál tengo que mirarme?
Profe: Ves, pasa poco, pero cuando tienes razón hay se te da. Mira, como truco, si en el libro pone Dvoretsky o Aagaard, va a ser difícil, pero seguro que es bueno, si la editorial es la Quality Chess, casi seguro que va a ser bueno también. Pero como hoy estoy de buen humor te voy a dar unos consejos para amebas y protozoos de uno de los mejores libros que me he mirado, Manual de Ataque, que por cierto, es del Aagaard ese que te he mencionado antes.
Bellota: Gracias profe, pero ponlos fácil que yo me entere.
Profe: Lo dicho, un Bellota auténtico.
A ver, lo primero que necesitas saber para atacar es que necesitas:
Tener la iniciativa
Mejor coordinación
Estar dispuesto a sacrificar
Ser preciso
Bellota: ¡profe que soy yo! ¿eso que quiere decir?
Profe: "Mamica mía" yo no sé que te has aprendido en todo este tiempo... A ver:
Tener la iniciativa, así para que tú lo entiendas, es que tus jugadas amenazan "cosas" al rival y el tiene que estar defendiéndose para que no le hagas una u otra cosa.
Mejor coordinación es que tus piezas, todas ellas, se ayudan unas a las otras y "trabajan juntas"
Lo de estar dispuesto a sacrificar está claro, muchas veces parece que el rival se ha librado del ataque o que alguna de nuestras piezas está fuera de la coordinación y para eso tenemos que estar dispuestos a sacrificar peones o piezas para poder seguir atacando.
La precisión es algo importante, es, para que tú lo entiendas, calcular bien, sin dejarnos intermedias ni trucos raros.
Bellota: Vale profe así lo entiendo un poco mejor, para atacar necesito que mis piezas se ayuden, calcular bien, ser yo el que pueda amenazar cosas y no tener "caquita" de sacrificar cosas para poder hacer que todo eso pase.
Profe: Al final resultará que sabes pensar y todo... Como sigas así tendré que dejar de llamarte Bellota.
Bellota: Vale y luego qué profe, ¿cómo empiezo a atacar cuando tenga ya todo eso?
Profe: A ver... Mucho quieres aprender tú de golpe, y si te lo enseño todo en una clase ¿cómo como yo luego?
Bellota: Venga profe, no me seas rata, yo te invito a un bocata de sobrasada
Profe: Vale, pero ¡picante o nada!
Bellota: Profe eres igual de "ratuja" que el maestro Abel (Abel Ojaos, gran entrenador y persona de Ajedrízate junto a mi "patelico' carne" el M.F José Lara)
Profe: A ver, cuando ya estás seguro de que tienes la iniciativa y tus piezas están bien coordinadas es el momento de empezar a crear el ataque.
Bellota: ¿de atacar, no?
Profe: ¡no! ¡preparar el ataque! no me seas manco, no se puede atacar si nos has preparado primero el ataque.
Bellota: Jo'e soecio, ya decía yo que esto no sería tan fácil.
Profe: Preparar el ataque es lo más importante y no es tan fácil como parece, pero para que tú te enteres esto consiste en, así resumido:
Estar enrocado
Tener controlado el centro
Haber creado debilidades en el rival
Elegir dónde vamos a atacar
Bellota: ¿cómo es escoger el sitio donde atacar? ¿pues al rey, no?
Profe: Hasta aquí hemos llegado, si te tengo que enseñar, hoy, que no todos los ataques son al rey me explota la cabeza. Hasta aquí hemos llegado, eso lo vemos el próximo día. Así que vamos a repasar lo más básico:
Para poder atacar necesitas, primero de todo; tener tu rey a salvo, tener tus piezas jugando y ayudándose entre si, que se puedan mover bien e ir de un sitio a otro; controlar el centro, porque así puede llegar igual de rápido a una parte u otra del tablero; haber creado debilidades en la posición del rival, algo que esté mal para poder atacarlo; no tener miedo de sacrificar, para poder abrir líneas, eliminar defensores...
Primero pon tu Rey a salvo, luego pon todas tus piezas a jugar y luego comienza a atacar.
Comentarios
Publicar un comentario